Sigue el debate: Casillas o Diego López. Y seguirá mientras Casillas sea suplente y mucho me temo que seguiría aunque recuperase la titularidad siempre que Diego no se la dejase en bandeja.
Una cosa está clara, con los dos la puerta está bien defendida y desde luego, son dos de los mejores porteros españoles y por ende, del mundo. ¿Quién debería jugar? Yo también tengo mi favorito, y la polémica y los debates son esencia de la historia del fútbol. El debate y la controversia son la salsa, la quintaesencia de este deporte.
La portería blanca siempre tuvo además un especial imán para este tipo de situaciones. División de aficionados y de prensa, porteros que hubieran sido titulares en cualquier otro club del mundo viendo fútbol sentados en el banquillo. Mítico fue el duelo entre Miguel Ángel y García Remón, alargado durante 15 temporadas en la que se fueron alternando en la titularidad (duelo que merecería un post aparte), el propio Casillas venció finalmente en otro duelo ante César, y antes que ellos, en la temporada 96-97 tres porteros de primerísima línea mundial coincidieron en el Madrid; Cañizares, un decadente pero aún en forma Paco Buyo, y el campeón mundial Bodo Illgner, que se quedó con la titularidad.
Así pues, en este debate entre Iker y Diego, no habría de extrañar tanto que ambos se juguen el puesto en beneficio de un club que se aprovecharía de los dos porteros dándolo todo por ser el elegido. La competencia siempre fue beneficiosa para el club. Pero ¿siempre?
Da la sensación que con la suplencia de Iker el Madrid está perdiendo muchas cosas de las que seguramente, sus directivos, no sean conscientes.
Para empezar, es muy planteable el respeto que el club está dando a sus leyendas, figuras todavía en forma a las que les debe eso, un respeto que Iker todavía no había perdido en el campo. En este caso, Casillas era además capitán en firme del equipo, adorado por todos hasta que Mourinho lo puso en el disparadero. Y no solo capitán de su equipo, sino también de la selección, donde la masiva presencia de jugadores barcelonistas hacía todavía más necesaria su relevante figura para el madridismo. Si finalmente Casillas no fuera titular en el Mundial (y lo fuera Valdés) el Real Madrid seguiría perdiendo presencia en la mejor selección española de todos los tiempos y que más títulos ha conseguido nunca (y que levantó el propio Iker).
Echando la vista atrás, además, de los muchos títulos que ha ganado Iker, tanto de clubes como de selección, nadie puede negar su cuota de importancia en ellos. ¿quién no recuerda la final de Champions ante el Leverkusen? ¿o la parada que le hizo a Robben en la final del Mundial?
Seguramente sin él España nunca hubiera pasado ante Italia en los penaltys, Holanda hubiera empezado ganando (y mucho me temo que terminado también) y el Madrid no hubiera levantando tantos títulos. El partido ante la Juve de esta semana demuestra que sigue estando en plena forma y mantiene el ángel o la suerte qeu lo encumbraron a ser mejor portero del mundo indiscutiblemente ¿por qué entonces su suplencia? No sabemos si Florentino está detrás de las alineaciones de Ancelotti tal como hace años se las hiciera Berlusconi a Carletto, pero lo que está claro es que algo raro pasa en esta historia.
El Madrid sigue perdiendo a un fijo en todos los onces a nivel mundial, presencia en la selección, sigue perdiendo cariño y simpatías por todo el mundo y además Casillas, uno de los mejores porteros de la historia del fútbol, y el mejor en la de España, está recibiendo un trato que no merecía ni merece, y quién sabe si para ganarlo tendrá que abandorar Concha Espina, como lo han hecho muchos otros, para regocijo de Mourinho, ultras y probablemente, del resto de equipos.
En toda esta historia, el menos culpable de todos es Diego López, que con su profesionalidad y gran momento de forma ha ayudado a dar forma a esta polémica, sin quererlo pero sin poder evitarlo. Quizá merezca también la titularidad del Real Madrid, pero en otra época. Esta es la época de Casillas y se la están arrebatando.
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